jueves, 18 de septiembre de 2008

Caca de un sueño


Debajo de este liviano humo nace transparente el niño, todas las lamparas encendidas, casi prendidas fuego, la noche besa su frente blanca, seca, el cuello con estantes y columnas tensas, el humo busca espacio, se pierde en el aire de noche, la piel es límite y aire a la vez, a oscuras entran todos y empienzan vientos que acarician, cortan, juntan su sangre, rompen las luces y las lámparas se abren de no sentir,como manos frías, y ya no hay palabras engranajes de su cansada garganta... el hombre va muriendo en la separación, en el mismo lugar donde hay tierra y donde hay amor.

3 comentarios:

Carolina dijo...

qué lindo efrén,
qué lindo

levantarme una mañana y encontrarme con un texto como este...

beso grande,
nos estamos viendo!

Anónimo dijo...

Efren!
soy Jimena, mira donde te vine a encontrar!
ESTAS ECHO UN FLOGGER! jaja
bueno ya sabes lo que pienso de lo que escribis ¬¬

un beso!
nos vemos en el conserv!

caro dijo...

Además del humo,
a pesar de las luces apagadas,
además de las oscuridades,
a pesar de los cortes, la sangre y las manos que se enfrían,

el hombre va naciendo en paisajes así
entre comas
eufemismos de la separación

me gustó haber visto y leído lo visto

me gusta esa proliferación de comas
ese paisaje desbordado
de piel y tierra

de memoria.